viernes, 22 de mayo de 2009

Picasso, Jack y Sherlock en Barcelona

“Me llamo Pablo Picasso y conocí al criminal más famoso de la historia”.
Así empieza la interesante y entretenida última novela de Esteban Martín, El Pintor de Sombras, coautor –junto con Andreu Carranza- del best seller nacional La Clave Gaudí, que fue editado en 2007.
Cuando me compré en su día La Clave Gaudí, lo hice pensando que, quizás, era otro libro de los que se habían apuntado al carro de las claves, enigmas y códigos que se hicieron tan famosos tras El Código da Vinci de Dan Brown, pero con base en Barcelona y con los monumentos de Antoni Gaudí como protagonistas, lo que daba el toque incitante, más si vivo y he sido guía turístico de esta ciudad. No me equivoqué. No obstante, al observar algunos fallos en el libro –especialmente lo referente a la constelación de la Osa Mayor en el mapa de Barcelona que lo encontré muy metido con calzador-, el libro se me fue haciendo cargante y, finalmente, tuve una pequeña decepción.
Durante el último Sant Jordi, mi intención era buscar, comparar y si encontraba algún libro bueno, comprarlo. E, inconscientemente, cada vez que me encontraba con El Pintor de Sombras, algo me decía que ese sería el elegido, pero la anterior experiencia con este autor me hacía dudar.
Había leído la sinopsis más de diez veces y el argumento me atraía mucho. Reunir en una misma novela a Pablo Picasso durante su adolescencia en Barcelona, Jack el destripador, los alter ego de Sherlock Holmes y el doctor Watson y el cuadro de Las señoritas de Aviñón me convenció y acabé comprándolo. Y no, no me ha decepcionado en absoluto.
Con un ritmo trepidante, capítulos cortos, personajes muy bien logrados, descripciones trabajadas y muy amenas, ambientación muy bien preparada y unos momentos realmente excepcionales, recomiendo El Pintor de Sombras a todos los que disfruten con la lectura de novelas históricas, negras, costumbristas o pictóricas, porque esta novela tiene de todo un poco. Los pasajes descriptivos de Pablo Picasso con los artistas de Els Quatre Gats como Isidre Nonell o Ramón Casas, el inicio de la segunda parte del libro con la descripción de los primeros encuentros entre Steven Arrow y el doctor Sherringford, con Arthur Conan Doyle y su Estudio en Escarlata de fondo, la relación de Picasso con las cinco prostitutas del burdel de la calle Avinyò, protagonistas del tan célebre cuadro del pintor malagueño y las cruentas descripciones de los crímenes de Jack el destripador en Barcelona hacen que sea una novela muy variada, ingeniosa, sorprendente y muy aconsejable.
Como el mismo autor explica al final de la novela: “Tal vez la mente de un escritor se puede comparar con un yacimiento donde, a lo largo del tiempo, materiales diversos se van sedimentando en diferentes estratos. Yo, en este novela, he tratado de excavar y poner en relación elementos que he ido encontrando para explicar una historia. Si a partir de aquí he conseguido interesar al lector y no defraudarle, me doy por satisfecho”.
Tan sólo me queda informar a Esteban Martín que, por lo que respecta a mí, muchas felicidades porque lo has conseguido sobradamente.

No hay comentarios:

Publicar un comentario