jueves, 13 de octubre de 2011

"Drácula, el no muerto" de Dacre Stoker



El no muerto está basada en las notas de Bram Stoker que fueron editadas de la primera versión de Drácula. A través de un exhaustivo proceso de investigación, Ian Holt y Dacre Stoker han conseguido dar vida de nuevo a estos personajes clásicos enuna novela electrizante, digna de la primera parte. El monstruo murió hace 25 años desintegrado, convertido en cenizas pero no ha sido tan fácil borrar las huellas de aquello que ocurrió en los Cárpatos hace un cuarto de siglo. Seward es adicto a la morfina. Holmwood se ha convertido en un hombre hermético, que nunca superó la muerte de Lucy, el amor de su vida. Jonathan es alcohólico y Mina -quien sigue manteniendo su belleza y juventud intactas— sabe que hace tiempo que su matrimonio hace aguas. Y Van Helsing es tan excéntrico incluso es sospechoso de ser el mismísimo Jack el destripador. Quincey Harker, el hijo de Jonathan y Mina, también tiene problemas. Es estudiante de derecho en la Sorbona por imposición paterna, pero su verdadera pasión es el teatro. En París irá a ver al más reputado actor del momento, el rumano Basarab, famoso y rodeado de misterio. Lo conoce y su relación de amistad con él se hace profunda, con lo que su deseo de perseguir una carrera en las artes escénicas reaparece. Quincey se entera de que una obra llamada Drácula, de un tal Bram Stoker, está en proceso de producción en el West End londinense y decide intentar que su amigo Basarab interprete al protagonista. Cuando lee la obra se da cuenta de que está basada en las vidas de sus padres y sus amigos y decide pedirles explicaciones. Es justo entonces cuando empieza la violenta caza de todos y cada uno de los que participaron en la persecución y muerte del vampiro, un peligro que también amenaza a Quincey y más de lo que él imagina… Pero ¿quién busca venganza? Y ¿por qué después de tanto tiempo?

Opinión: Pongamos que te dicen que, en una misma novela, se entrecruzan personajes como Drácula, Jack el Destripador y la condesa Bathory. Como es obvio, lo primero que piensas es que bien merece ser leída. Si, además de esto, te ofrecen la posibilidad de saber qué les ocurrió a los personajes que, veinticinco años antes, habían sido los protagonistas de Drácula de Bram Stoker, mejor que mejor; si Lord Arthur Holmwood ha superado la desaparición de su Lucy, qué se ha hecho de Mina y Jonathan y si éste ha superado la relación de Mina con el conde, si van Helsing sigue tan zumbado. Pongamos que te lo explican y, tras leerlo, piensas que se han pasado unos cuantos pueblos, que puede que el chicle todavía diera un poco más de sí pero que lo han alargado tanto que ya ni para hacer spaguettis, que un poquito más de moderación hubiera ido genial a las novela, que… En resumen, no hay para tanto.

Valoración personal (de 0 a 10): 6,7

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