viernes, 4 de septiembre de 2009

El maldito retorno... pero Dios es un DJ

No lo niego.
He tenido abandonado mi blog y lo siento.
Pero entre las vacaciones, la frustrante vuelta al trabajo –con añadido de distensión de ligamentos externos de mi tobillo derecho y muerte prematura de mi moto, lo que me provocó que, hasta hace una semana, el trayecto de ida y vuelta de mi casa al trabajo rondara las 3 horas, precisamente las dos semanas más infernales del verano debido a la puñetera caléndula- y que, cuando tengo un poco de tiempo libre, estoy enfrascado en intentar terminar mi novela antes de fin de año –tras cumplir ocho del inicio de su escritura-, ha ocasionado que el blog haya quedado un poco olvidado. Aunque esto tiene pronta solución, ya he entrado en él, le he pasado un poco la mopa y el trapo del polvo y ha quedado como nuevo.
No obstante, a partir de hoy, van a haber una serie de cambios.
Obviamente, seguiré escribiendo mis paranoias, comidas de tarro y momentos delirantes pero, además de ello, voy a iniciar un recorrido por las mejores canciones del día. No sé si os ocurre a vosotros pero a mí, dependiendo del día, necesito escuchar un tipo de música u otro. Pues bien, os voy a hacer partícipes de mis estados de ánimo musicales.
El lanzamiento de Spotify me servirá de mucho porque podré ir copiando los enlaces de las canciones destinadas a pertenecer al blog de los sentimientos, al blog de la locuras, al blog de…, a mi blog en definitiva y, como no podría ser menos, si la música es una parte imprescindible de mi vida, la música debe permanecer indefectiblemente unida a mi blog.
E iniciaremos este nuevo apartado con una de las mejores canciones que he escuchado en mi vida. Posee ritmo, sensualidad, pasión, calidad, tempos increíbles y una filosofía en la letra que debería existir “forever”. Me refiero a “God Is A DJ” de Faithless. El rapeo de Maxxi Jazz adoctrinando con su “Esta es mi iglesia, aquí es donde cicatrizo mis penas, por esta noche, Dios es un DJ”, mientras Sister Bliss te prepara un cocktail absolutamente perfecto de sintetizadores y bases de ritmos que van desde el downtempo hasta el deep house bajo la fructífera e intensa producción del hermano de la cantante Dido, Rollo, uno de los fundadores del grupo británico.
Disfrutadla en el link God Is A DJ
Por cierto, ¡he vuelto!

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