Tan sólo estamos a mediados de febrero,
pero ya puedo asegurar que se ha editado un claro candidato a convertirse en el
álbum del año, Migration. El compositor nacido en Brighton, Simon Green, lanza
su sexto disco bajo el seudónimo de Bonobo, cuatro años después del tan
aclamado The North Borders y siete de su trabajo más comercial hasta el
momento, Black Sands.
Bonobo esculpe con esmero diferentes
horizontes de soberbia flexibilidad, jugando invariablemente con diversas
arquitecturas sonoras, que van desde naturalezas claramente relajantes y
crepusculares hasta matices bailables con toques sombríos, como una inmensa
paleta de colores, que van desde el añil más pálido hasta el invisible y mágico
ultravioleta.
Valoración personal (de 0 a 10): 8,3
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