Todos
los melómanos conocemos LA sensación -sí, con mayúsculas. La deseamos como el aire que respiramos, como el agua fresca en
la cara cualquier día de verano, pero pocas veces -incluso en según qué
temporadas se pueden contar con los dedos de una mano-, se consigue esa
sensación de clímax total, de orgasmo auditivo que te lleva a conocer
íntimamente cada uno de los poros de tu piel al erizarse en un acto de
pleitesía absoluta frente a una canción, un tema que te ha hecho olvidarte de
tus pies, de tus manos, de todo tu cuerpo, que te hace cerrar los ojos y
adentrarte en el pentagrama de emociones de la que está configurada.
Hace unos meses intuí alguna nota
por la radio y, lamentablemente, el locutor no dijo el nombre del cantante ni
el título de la canción. A partir de ese momento, mi mente no dejó de entonar
esas pocas notas que había escuchado de refilón. Días después puse en Spotify la radio de uno de mis autores
favoritos –el británico Fink- y cuál
fue mi sorpresa que esas notas surgieron del ordenador, traspasaron los
auriculares y llenaron por completo la sala donde me encontraba; era el tema Human de Rag’n’Bone Man,
el cual ya me había dejado atónito con su primer álbum, titulado Wolves y donde hay temas de una calidad
tan exquisita como Mother, o la
canción Perfum, incluida en su EP Disfigured.
Rory Graham, auténtico nombre del artista de Uckfield y afincado en Londres, conocido como Rag’n’Bone Man, es un tipazo con cuerpo
de maderero de Alaska, pero con una
voz que te deja sin aliento, con un rasgado aterciopelado que te hunde entre
los cojines del sofá, con una entonación tan perfecta y tan rítmica que se
mueven incluso los pelos de las orejas, con una melodía tan acoplada a la base
rítmica que no puedes imaginar otra base bajo/batería que no sea con esa cadencia
que irradia Rag’n’Bone Man –escuchar
el tema Ego y sabréis de lo que
hablo-, un soul pop con raíces
profundas pero con producción del siglo XXI – no dejéis de gozar del tema Arrow-.
Uno de los mejores discos
que he escuchado en los últimos años.
Valoración personal (de 0 a 10): 9,4
No hay comentarios:
Publicar un comentario