El dúo original formado por Andy Barlow –productor- y Lou Rhodes –voz-, flanqueados por
músicos como Jon Thorne, Oddur Mar Runnarson o Nikolaj Bjerre, lanzaron su sexto
trabajo, titulado Backspace Unwind, álbum
similar a sus anteriores y, a su vez, diferente. Porque el dúo conocido en el
mundillo musical como Lamb,
claramente lanza balidos de una belleza inigualable y otros difícilmente
comprensibles.
Para un álbum tan dedicado al elemento
electrónico, sin duda tiene un alto nivel de calidez y humanidad. El contenido
lírico emparejado con las excelentes melodías y la forma en que la voz
interactúa y baila alrededor de los acompañamientos está muy bien conseguido.
No hay una mala canción en todo el álbum, y algo imposible de negar es que en
cada uno de sus discos hay uno o dos temas que son auténticas obras maestras.
Aunque creas que no has oído hablar nunca de este grupo, ¿seguro que no te has
emocionado nunca escuchando las notas de la canción Gabriel, incluída en su tercer trabajo, What Sound? Pues en Backspace Unwind ocurre algo similar
con el pedazo de tema titulado We fall in
love que, sólo escuchar las primeras notas –como sobresaliendo de una cajita
de música- tus sentidos ya permanecen alerta, pero cuando entra la angelical
voz de Lou con esa fantástica base de percusión, la gallina de piel te va desde
la nuca hasta los tobillos. Si te faltaba el toque final, escucha Nobody else y reconocerás tu íntima
pasión por la calidez de Lou Rhodes.
Lástima que no todos los temas sean iguales pero,
afortunadamente, todos tienen ese toque corderil de Lamb.
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