"Tiernas" criaturas en Las Vegas

Tiernas criaturas, es la primera novela del autor norteamericano Charles Bock, el cual y según las diferentes críticas estuvo once años para escribirla y, para muchos de estos críticos, está considerada una de las mejores novelas publicadas en este inicio de siglo. Reconozco que hay momentos que la calidad literaria está por encima de la habitual pero, con toda la sinceridad del mundo, lo he terminado de leer porque ya era una cuestión del libro o yo. Esta novela coral, que revive la vida de varios personajes muy variopintos, pero todo ellos unidos en un momento u otro con la desaparición del adolescente Newell en la salvaje, histriónica y anárquica ciudad de Las Vegas, permite saborear momentos sublimes, especialmente cuando trata la paulatina degradación matrimonial de los padres de Newell, Lincoln y Lorraine mientras esperan que, de un momento a otro, suene el teléfono con alguna noticia sobre el paradero de su hijo. O la relación de éste con Kenny, mucho mayor que él, homosexual, introvertido y amante de los cómics. O la tortuosa relación entre Ponyboy, un camello guaperas pero con un pasado chapero, y Cherri Blossom, la bailarina de striptease que por amor sería capaz de hacer casi cualquier cosa. O el grupo de adolescentes que desbaratan su vida en la calle en busca de cualquier cosa para malvivir entre el lujo caótico y pervertido de la ciudad. Pero, a pesar de todo, Tiernas criaturas posee algo que no te engancha a la novela de principio a fin, necesitas periodos de descanso porque te apabulla con tantos capítulos interminablemente descriptivos. Entiendo lo de los once años para terminarlo y puedo imaginarme la cantidad de veces que reescribió sobre lo escrito pero, para mí, aún considerándola de una calidad muy alta, Charles Boch se ha pasado un poco con el torbellino por el nos quiere llevar con su novela.